Antes de su incursión al crimen organizado, Francisco Javier Rodríguez Hernández, “el XL” o “El Señorón”, líder del CJNG en el estado de Morelos, colaboró en las redes juveniles del PAN estatal de 2012 a 2015, y perteneció al grupo de Daniel Martínez Terrazas, el grupo político que actualmente ostenta el poder en el partido en el estado.
Una fotografía que circula en redes sociales retrata a un joven entusiasta con la actividad política en los comicios presidenciales de 2012, y posteriormente en el proceso local de 2015 para apoyar la candidatura del empresario panista Marcos Manuel Suárez.
A la distancia “El Señorón”, también líder del grupo Los Colombianos, junto con Abel Maya, identificado con el Cártel de Los Beltrán Leyva, y Homero Figueroa, cabeza del Comando Tlahuica, se convirtió entre los objetivos principales de detención en el estado, de acuerdo con el comisionado estatal de seguridad, José Antonio Ortiz Guarneros.
Para las autoridades gran parte de los crímenes registrados en la zona centro del estado es resultado del enfrentamiento entre “El Señorón” y Abel Maya, por el control del territorio morelense.
Homicidios emblemáticos como el ataque contra un grupo de dolientes, en septiembre de 2020 en Cuernavaca, y el asesinato de tres jóvenes en un bar de esta ciudad, en mayo de 2021, son muestra de la violencia que ejercen estos grupos delictivos, dicen las autoridades.
En la foto de grupo del PAN juvenil, cuya autenticidad no ha sido desmentida por el comité estatal, se ve a un Francisco Javier con convicciones políticas al tiempo que trabajaba de mesero para ganarse el sustento familiar, dicen sus excompañeros.
Tiempo después fue “cadenero” y luego inauguró su propio bar, La Pecera, en la avenida Cuauhtémoc de la colonia Potrero Verde, pero una noche un grupo armado disparó contra clientes y personal administrativo con saldo de un guardia muerto y otra persona lesionada. El bar jamás volvió a abrir sus puertas.
El nombre de Francisco Javier Rodríguez Hernández comenzó a surgir en las tarjetas policiales luego de la captura, en agosto de 2019, de Santiago Mazari Miranda, “El Carrete”, líder del Cártel Los Rojos, con presencia en los estados de Guerrero y Morelos.
Del PAN a las calles
En ese grupo de adolescentes del PAN se ven los rostros de Daniel Martínez Terrazas, segundo del clan que detenta el poder político en el PAN desde 2015, y de Laura Hernández Cruz, actual secretaria de desarrollo social en el Ayuntamiento de Cuernavaca.
“Francisco, ‘El Señorón’, se integró previo a la campaña de 2012. Él se lleva con los chavos, los famosos Boca Seca, de la colonia El Empleado y prácticamente inicia trabajo partidista con Laura Hernández y Daniel Martínez, pertenece a la misma generación y corriente panista”, dicen sus excompañeros.
Quienes conocieron a Rodríguez Hernández lo ubican como miembro activo del PAN que, de acuerdo con el reglamento del partido, es que aquel ciudadano que siente una fuerte identificación con los principios e ideología de Acción Nacional, además de comulgar con sus ideales y prácticas, lo que le lleva a decidirse por tener una participación más efectiva que contribuya a conseguir los objetivos partidistas.
“Francisco era muy activo, era de los chavos que repartía volantes, agitaba las banderas del PAN y participaba en las batucadas que trajo la campaña de 2012, cuando contendió y ganó la gobernatura el panista Marco Antonio Adame Castillo”, dicen sus excompañeros.
“El Señorón” nunca se afilió al PAN, por lo menos eso dicen en el PAN, pero después su nombre sería recordado por los habitantes de Cuernavaca porque a través de su grupo distribuyó despensas para apoyar a las familias vulnerables frente a la pandemia del covid-19.
Por la revelación de la fotografía preguntamos su opinión al comité estatal y como respuesta obtuvimos que “en próximos días darán respuesta a este y otros temas”.
Desde el año pasado el gobierno ofrece 500 mil pesos de recompensa a quien ofrezca datos de su paradero, pero hasta ahora nada se conoce de Francisco Javier y a pesar de que el 2022 continuó con el registro de crímenes violentos en Cuernavaca, sus nuevas autoridades decidieron abandonar el Mando Coordinado Policía Morelos.