Naomi Carmona / Grupo Marmor
Morelia, Michoacán.- Con la visita de la Secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde Luján, los gobiernos Federal y de Michoacán, acordaron comenzar de inmediato la revisión de las condiciones laborales y la cantidad de trabajadores del campo que no están afiliados al Seguro Social.
Se trata de una serie de acciones en materia de formalización de empleo, que ayudará a reforzar las capacidades laborales en el campo michoacano, a través de la garantía de trabajo digno, que se refleje en mejores condiciones y por ende, mayor productividad.
A decir de la funcionaria federal, en México sólo uno de cada diez campesinos tiene seguro social, de ahí la urgencia de afiliar a las y los jornaleros, para ir trabajar en el campo signifique una opción digna.
“No podemos seguir apostando por una país por un modelos laboral excluyente, en el cual se genere riqueza pero eso no se ve traducido en la protección y en mejorar las condiciones laborales de los trabajadores, la pandemia nos ha dejado claro que ese no es el modelo”, destacó Alcalde Luján.
Por su parte, el gobernador de la entidad, Alfredo Ramírez Bedolla, informó que, entre el sector productivo, empresarios, gobierno federal y el estatal, han trabajado durante cinco meses en el convenio firmado hoy, por lo que prometió no se trata solamente y una firma, sino del compromiso de darle a los michoacanos seguro popular.
“Es un mal muy conocido que miles de trabajadores sufren precariedad laboral que se suma a la dolorosa ausencia de derechos laborales como es la seguridad social. Hemos trabajado para que en una tarea diaria y cotidiana para que todos los trabajadores de Michoacán tengan seguro social”.
A decir del gobernador, son alrededor de 200 jornaleros en campos michoacanos, que no están registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).