Grupo Marmor
Por más de 14 años la clínica Niapper, con sede en Morelia, mantuvo los servicios para realizar el procedimiento de hemodiálisis a los pacientes con enfermedad renal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) delegación Michoacán, tiempo en que obtuvo el monopolio del servicio en la entidad.
Sin embargo, este año la licitación fue ganada por las clínicas “Plenitud Centro Coahuilense de Hemodiálisis S.A. De C.V.“, que en Morelia ofrece el servicio a través de la clínica García de León, la cual, a un mes de iniciar con los procedimientos de algunos pacientes, se ha visto envuelta en acusaciones de presuntos usuarios que se quejan del servicio.
Lo que se catalogó en primer momento como una injusticia contra los pacientes renales en Michoacán, por otros fue considerada una “guerra sucia” en contra la clínica que ganó la actual licitación, misma que desmintió a los pacientes, a quienes señaló de “venderse” a través de la antigua empresa para desprestigiar a la clínica que actualmente ofrece los servicios.
Derivado de una nota periodística realizada por esta redacción, donde los pacientes acusan 4 muertes por negligencia médica ocasionada por la clínica actual, Grupo Marmor se dio a la tarea de darle seguimiento a la transmisión en vivo que realizó Revolución Social, donde se asegura que no están registrados dichos nombres en la clínica García de León, donde quedan infundadas las identidades de los quejosos y denunciantes de la nota informativa.
En una investigación realizada por Grupo Marmor, se constató que el doctor Mario Alcantar Medina sostuvo el monopolio del servicio de hemodiálisis a través de la empresa anterior, de nombre Fressenius, cuya fachada es presuntamente el prestanombre de la clínica a nombre de su esposa y suegra, mientras que en su declaración patrimonial pública no participa en procesos de licitación al ser trabajador del Instituto de Seguridad Social.
El doctor continúa activo en el área de hemodiálisis, además es proveedor de servicios subrogados desde el instituto, sin embargo, la actual clínica García de León acusó que los pacientes quejosos no forman parte de la lista de personas a atender, por lo que se trataría de gente contratada, acusó la dirección general.
Los pacientes han señalado que no defienden ninguno de los dos lados, ya que sólo piden un servicio de calidad como acusan en contra de la actual clínica García de León, sin embargo, por años la antigua empresa realizó los servicios bajo su supervisión, la cual cobra el 5% por administración del contrato, además de dar su nombre como participante, así como el de su suegra y esposa.
Ante tal situación, se constató que las instalaciones están en buenas condiciones a pesar de las que supuestamente fueron sembradas por la antigua clínica que durante 14 años mantuvo el monopolio de la contratación de los servicios de hemodiálisis subrogados por el IMSS.