En una tiendita ponen una cámara en el baño y graban genitales de las personas

Banner

Un grupo de unos 30 estudiantes se introdujeron a un local que se encuentra frente al Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Naucalpan y causaron destrozos en el interior.

Los estudiantes acusaron a los propietarios del local de grabar con cámaras el interior de los sanitarios de mujeres, lo que causó el enojo de ellos.

“Salieron en grupo por la puerta principal del CCH y los jóvenes llegaron directo al local causando destrozos en máquinas, computadoras, vitrinas y exhibidores, además de saquear la mercancía”, explicó  uno de los comerciantes. 

A través del grupo de Facebook de la comunidad estudiantil del CCH Naucalpan, un joven denunció que sus genitales fueron grabados sin su consentimiento al interior de los baños de la tienda “Miscelánea Ale”, que se ubica frente al plantel. Cuando salió, la siguiente en turno era su amiga, pero un trabajador del establecimiento le negó el paso y posteriormente entró al baño; ambos creyeron que había ingresado a revisar que no estuviera vomitado, pero en lugar de ello acusaron que fue para reiniciar una grabación a través de un celular que colocó sobre la tapa del depósito de agua. Después dejó que la joven pasara. 

“Mi amiga entró con desconfianza y casi inmediatamente notó que se encontraba un celular arriba de la tapa del depósito, en forma horizontal, apuntando hacia enfrente con la cámara trasera, tomó el celular y vio que llevaba 10 segundos grabando, al meterse a la galería vio que estaba llena de videos, incluido el mío, donde mostraba por completo los genitales de personas menores de edad o mayores, sin importar el género y grabados sin el consentimiento de las personas”.

La estudiante salió del baño con el celular en la mano, pero contó que el trabajador se lo arrebató y corrió hasta la parada del camión en donde pasan el transporte que va hacia la estación del Metro Toreo. 

Alan, estudiante de este plantel contó que acudió al lugar el miércoles 29 de marzo y antes de pagar por el servicio, el dueño de la tienda le advirtió “sin vomitar, porque les vamos a cobrar 30 pesos (en lugar de 5, que es lo que comúnmente cobran)”. 

Con información de Silla Rota