Marcelo se despidió entre lágrimas luego de su permanencia en el Real Madrid durante 16 años, se confesó “afortunado” por haber echo “historia”.
Luego de ver un video dedicado a toda su trayectoria, a Marcelo le costó contener la emoción, agradeció por esta despedida inolvidable junto a los trofeos conquistados.
Marcelo pidió que este día, fuese bonito pese a las emociones, orgulloso de la imagen que deja en el madridismo.
Además, Marcelo siente que una parte de él se queda en el Real Madrid gracias a su hijo Enzo, una de las jóvenes perlas de la cantera.