Familia de Jessica González acusa falta de sensibilidad, revictimización y violencia en audiencia

Foto: Naomi Carmona
Foto: Naomi Carmona
Banner

Naomi Carmona / Grupo Marmor

Morelia, Michoacán.- Fueron 81 días de retraso para que comenzara el juicio oral del feminicidio de Jessica González Villaseñor, ante un amparo promovido por la defensa del presupuesto feminicida, Diego Urik N., detenido el 30 de septiembre del 2020. Han transcurrido casi 23 meses de que el señalado fuera imputado y la familia de la joven maestra vive en la incertidumbre de no obtener justicia.

“Ya va más de un año y medio y no tenemos la certeza de que vamos a tener una pena justa, al contrario cada vez tenemos que seguir luchando porque la Fiscalía, ni los jueces nos pueden garantizar justicia contra alguien que mató a más de 30 golpes, la violó y tiro en su fraccionamiento y que quede completamente sentenciado en una cárcel porque en la calle quién lo quiere libre”, mencionó Cristo González, hermano de “Jessi”.

Criticó que durante el desahogo de testimonios, no se mostraron los videos íntegros del momento cuando su hermana y Diego llegan juntos abordo un coche al fraccionamiento donde él vivía, y donde fue vista la última vez la joven; en su lugar, el juez Ariel Montoya y a los presentes en la sala 16, observaron capturas de pantalla del materia vedográfico.

La familia de Jessica también se siente revictimizada durante el proceso, lo que les significa una falta de sensibilidad, esto ante lo que refirieron, fue un hostigamiento por parte de la defensa de Diego Urik.

Foto: Naomi Carmona

“Esto no es un proceso completamente humano en donde solamente los que quedamos exhibidos los que quedamos lastimados y heridos somos nosotros”, agregó Cristo.

Durante una entrevista al concluir el primer desfile probatorio, Verónica Villaseñor, madre de Jessica, narró un desagradable encuentro que tuvieron en conjunto con el padre de Diego Urik, quien fue objeto de llamadas de atención del juez Montoya, y finalmente fue sacado de la sala 16 por continuar con un mal comportamiento.

“Íbamos entrando y el papá enseguida salió de la sala y me aborda directamente y le dije ‘si no quiero ni verte menos quiero hablar contigo’ y continúe caminando pero después abordo a mi esposo”, narró la señora Verónica.

“Ustedes pueden ver la calidad de personas que están atrás de este procedimiento, ustedes vieron la calidad de humanos que hay como su papá y cómo se comportaba adentro de un juicio, a pesar de que nosotros somos a los que nos mataron a su hija y nosotros no perdemos la cordura, sin embargo, una persona completamente violenta no podía estar dentro de el juicio y lo tuvieron que sacar y desafortunadamente tenemos que vivir todo esto proceso con miedo a que esa persona violenta o su hijo cometen un acto”, agregó Cristo.

La próxima audiencia se llevará a cabo el 23 de junio a las 13:30 pm. Adrián González, hermano mayor de Jessi, será el siguiente en desahogar su testimonio.