El señor Omar Rodríguez mantenía con el a tres leones en su azotea en condiciones muy buenas, pero la Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) en 2018 recibió un reporte de rugidos, por lo que acudieron al domicilio del Dueño y se los quitaron para llevarlos a un refugio.
En 2019 los tres leones de aproximadamente un año y medio que contaban con todos los papeles en regla y forma, fueron recogidos de la azotea de Omar ubicada en la alcaldía Iztacalco y llevados al Santuario “Black Jaguar-White Tiger”.
A principios de este mes salieron videos en redes sociales exhibiendo el maltrato que recibían en ese mismo refugio, ahí fue dónde Omar reconoció a sus leones, entre lagrimas fue a visitarlos para llevarles 500 kilos de carne para que pudieran comer, pues estaban en pésimas condiciones.
“Dijeron que los llevarían a un santuario y están en un infierno para animales“