En su conferencia matutina de este miércoles, el presidente Andrés Manuel López Obrador se deslindó de las acusaciones a Alito Moreno, dirigente Nacional del PRI.
El mandatario sostuvo que no es su fuerte la venganza y no fabrica delitos, esto luego de que el día de ayer la Fiscalía General del Estado de Campeche, solicitara de manera formal, ante la Cámara de Diputados, el desafuero de Alejandro Moreno Cárdenas, para proceder en su contra por aparecer como responsable del delito de enriquecimiento ilícito.
En ese sentido López Obrador insistió que Campeche es un estado independiente a la Federación que tiene facultades para investigar.
“Nosotros no llevamos ninguna persecución política, a mi me pueden acusar de muchas cosas, inventar, pero nunca van a poder decir que soy un incongruente”, señaló.