En el pasado 2022 Argentina registró una inflación anual de 94.8 por ciento, el cual es el nivel más alto en 32 años y uno de los más elevados del mundo, informó el Instituto de Estadísticas (Indec).
Este índice de precios al consumidor registró en diciembre un alza de 5.1 por ciento, lejos de 7.5 por ciento de julio, pero por encima del incremento de 4.9 por ciento de noviembre.
Ciertos rubros que sufrieron mayores alzas de precios fueron vestimenta y calzado, con 120.8 por ciento, y restaurantes y hoteles con 108.8 por ciento.
Dicha inflación no se veia así desde 1991, cuando en varios meses hubo aumentos anuales de más de cien por ciento, luego de dos años de hiperinflación de más de mil por ciento en 1989 y 1990.
La tercera economía de América Latina está inmersa en una inflación crónica, de dos cifras desde hace una década, un fenómeno de múltiples causas tanto internas como externas.