La espectacular ceremonia de coronación de Carlos III y su esposa Camila, la cual no se había visto en el Reino Unido desde hace 70 años, se inició el sábado en Londres, aunque se vio afectada previamente por la detención de varias personas que pretendían manifestarse.
El rey, de 74 años, y su esposa, de 75, llegaron en carroza desde el Palacio de Buckingham a la Abadía de Westminster, donde se celebró la ceremonia.
A pesar de la persistente lluvia, miles de admiradores se congregaron a lo largo del recorrido para saludar a la pareja real.
Durante el camino, Carlos III y Camila pasaron frente a las pancartas amarillas del grupo antimonárquico Republic, las cuales mostraban el mensaje “No es mi rey”. Un grupo de estos activistas fue detenido cuando se preparaba para protestar.