Expertos detallaron que los productos procesados y ultra procesados aportan alrededor de 45% del sodio que se consume a diario en México
Según expertos en nutrición, en la Ciudad de México se ha confirmado que el consumo de sodio en México supera las recomendaciones establecidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este exceso se atribuye principalmente a la alta ingesta de productos procesados y ultra procesados, los cuales contribuyen aproximadamente al 45% del sodio consumido diariamente. Esta información resalta la importancia de abordar el problema del consumo excesivo de sodio, especialmente a través de la reducción de alimentos procesados y la promoción de una alimentación más saludable.
Durante la semana de sensibilización del consumo de sodio y el lanzamiento de la campaña “Salva tu corazón, reduce tu consumo de sodio”, especialistas de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y la Alianza por la Salud Alimentaria destacaron los beneficios de reducir el contenido de sodio en los productos ultraprocesados mediante la reformulación.
En México, se ha observado que el consumo de sodio en la población excede las recomendaciones establecidas por la OMS. Por ejemplo, se estima que los escolares consumen alrededor de 2.8 gramos de sodio diariamente (equivalente a 7.1 gramos de sal), los adolescentes consumen 3.7 gramos de sodio (9.4 gramos de sal) y los adultos mayores de 18 años ingieren 3.1 gramos de sodio al día, lo que equivale a 7.8 gramos de sal.
Para abordar esta situación, los expertos resaltaron la importancia de reducir el contenido de sodio en los productos ultra procesados a través de la reformulación. Esto implica ajustar las recetas y procesos de fabricación para disminuir la cantidad de sodio sin comprometer el sabor y la calidad de los alimentos. La campaña “Salva tu corazón, reduce tu consumo de sodio” busca concienciar a la población sobre la importancia de elegir opciones con menor contenido de sodio y promover cambios en la industria alimentaria para ofrecer productos más saludables.
Añadió que “el consumo actual de sal en nuestra región es como dos tres veces superior” a lo recomendado, pues oscila entre “8.5 y 15 gramos” y alertó que en 2019 ocurrieron “10.8 millones de muertes por hipertensión al año, y esto tiene una asociación directa con la presión arterial alta”. Así que “disminuir la ingesta de sodio reduce de forma significativa la tensión arterial sistólica y diastólica en los adultos y los niños y en personas con hipertensión y sin hipertensión de todos los grupos”.
Antes de la implementación del etiquetado frontal de advertencia en 2020, se observó que varias empresas de cereales y panes redujeron la cantidad de sodio en el 56% de sus productos. Este hecho demuestra que la industria tiene la capacidad de ajustar sus formulaciones, especialmente en lo que respecta al sodio, ya que algunas marcas tomaron medidas para evitar el sello de advertencia.
Esta situación confirma que es factible para las empresas realizar modificaciones en sus productos con el objetivo de reducir el contenido de sodio. En el pasado, algunas marcas han demostrado que es posible realizar ajustes en sus formulaciones para cumplir con los estándares requeridos y evitar las advertencias en el etiquetado.