Laura Avalos | Grupo Marmor
Morelia, Michoacán.- De acuerdo a lo informado por el observatorio de seguridad humana de la región de Apatzingán, desde el pasado nueve de junio inició un desplazamiento forzado masivo en aquella región.
Y es que Jorge Armando Vázquez Orozco, Párroco de la comunidad de Presa El Rosario, informó que en su localidad se registró el ingreso de pobladores de las comunidades Llano Grande, Bateas y Tepetate, quienes han sido desplazados por la situación de violencia que viven en sus regiones.
Es así como se dio a conocer que son 800 personas, es decir, aproximadamente 200 familias las que han tenido que huir de sus hogares y quienes han refugiado con familiares y amigos en Presa El Rosario y Apatzingán.
Además, se señala que son por lo menos doce familias las que se encuentran en riesgo extremo y que únicamente quedan cinco familias en “La Batea” de los 681 habitantes que tenían.
Por tal motivo, se notificó a la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación y otras dependencias con mandato legal en la materia, así como a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para las Personas Refugiadas (ACNUR).