La elección de esta fecha se debe a los orígenes de la industria biotecnológica, ya que el 16 de junio de 1980, el ingeniero genético Ananda Mohan Chakrabarty desarrolló una bacteria capaz de descomponer el petróleo crudo para tratar derrames de petróleo, lo cual tuvo un impacto positivo en el medio ambiente.
Este descubrimiento científico fue considerado patentable, respaldado por un fallo emitido por la Corte Suprema de los Estados Unidos. La biotecnología es un conjunto de disciplinas que utilizan componentes de organismos vivos, como células, genes y enzimas, para obtener productos mediante la aplicación de la ingeniería genética.
Es interesante destacar que la biotecnología se divide en diferentes categorías según sus aplicaciones:
- Biotecnología verde: se centra en el estudio de cultivos más sostenibles y resistentes a plagas y eventos climáticos adversos, como sequías.
- Biotecnología roja: está relacionada con la creación de vacunas y medicamentos.
- Biotecnología azul: utiliza recursos marinos para obtener productos sanitarios, acuícolas y cosméticos.
- Biotecnología blanca: se enfoca en los procesos industriales y el desarrollo de biocombustibles.
- Biotecnología gris: está vinculada con el medio ambiente y la recuperación de ecosistemas naturales.
- Biotecnología amarilla: se aplica a investigaciones relacionadas con la nutrición y la producción de alimentos.
- Biotecnología dorada: también conocida como bioinformática, se ocupa de la obtención, almacenamiento y análisis de secuencias de ADN y aminoácidos.
La biotecnología ha tenido numerosas aplicaciones beneficiosas en diversas áreas. En el campo de la medicina, ha contribuido significativamente durante la pandemia de COVID-19 mediante el desciframiento del genoma del virus SARS-CoV-2. También ha sido fundamental en el desarrollo de terapias génicas, la producción de la hormona del crecimiento, la vacuna contra la hepatitis B y la fabricación de insulina.
En el ámbito de la alimentación, se destaca la creación de alimentos transgénicos, mientras que en la industria se han desarrollado materiales inteligentes. Además, la biotecnología ha contribuido a la recuperación de ambientes contaminados mediante el uso de plantas, microorganismos y enzimas.
La biotecnología continúa siendo un campo en constante evolución y ofrece un gran potencial para abordar desafíos globales y mejorar la calidad de vida de las personas
