El jueves por la mañana, se encontró el cuerpo sin vida de Jesús González Ríos, dirigente del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en el municipio de Copala, ubicado en la Costa Chica de Guerrero. El hallazgo tuvo lugar cerca de la Laguna de Chautengo, en el municipio vecino de Florencio Villarreal. El cuerpo mostraba signos de tortura y González Ríos había sido privado de su libertad casi 24 horas antes.
La Fiscalía General del Estado (FGE) informó que el cadáver fue descubierto alrededor de las 9 de la mañana en un camino que conduce a la Laguna de Chautengo. Según el reporte, presentaba indicios de haber sido sometido a tortura.
El miércoles al mediodía, un grupo armado interceptó a González Ríos en la cabecera municipal de Copala y lo sacó de su automóvil. Ante su desaparición, familiares y amigos bloquearon la carretera federal Acapulco-Pinotepa, en Oaxaca, exigiendo a las autoridades que emprendieran una operación de búsqueda.
Por la noche, circuló en redes sociales un video en el que González Ríos denunciaba que había sido amenazado de muerte el 1 de mayo por la alcaldesa de Copala, Guadalupe García Villalva, con el objetivo de que no compitiera por la alcaldía en 2024. En el video, González Ríos pedía que se difundiera en caso de que algo le sucediera.
El dirigente estatal del PVEM, Alejandro Carabias, condenó el asesinato de su compañero y exigió al gobierno de Evelyn Salgado Pineda, perteneciente al partido Morena, que investigue el crimen y evite la impunidad. También solicitó garantías para quienes se dedican a la política en Guerrero.