El 1 de noviembre en México, los niños suelen salir a pedir calaverita en el Día de Muertos, disfrazándose de personajes populares de películas y redes sociales.
Sin embargo, en Acapulco, que sufrió un devastador desastre natural, un niño decidió disfrazarse improvisadamente como el huracán Otis, que golpeó la ciudad.
Llevaba una bolsa de plástico con agujeros para la cabeza y los brazos, junto con una rama en el hombro y las palabras ‘huracán Otis’. Se le ve sonriendo con su botín de dulces en una foto compartida en redes sociales. También se unieron otros niños disfrazados, como una princesa y una momia.