Durante la Nochebuena, muchos mexicanos disfrutan de platillos tradicionales navideños, como el pavo, la pierna y los romeritos con diversas salsas. El 24 de diciembre es un día de reunión familiar, intercambio de regalos y convivencia.
El 25 de diciembre, se suele disfrutar de los recalentados, considerados por algunos incluso más sabrosos que la cena de Nochebuena. Sin embargo, es importante tener en cuenta la fecha de caducidad de los recalentados para evitar riesgos de intoxicación alimentaria.
Según un estudio de la Universidad de Coventry, el recalentado navideño tiene un consumo preferente de tres días. Por ejemplo, si se cocinó el 24 de diciembre, la fecha límite para consumirlo sería el 27. Las carnes como pavo, pierna y res deben refrigerarse cubiertas con papel aluminio. Es recomendable recalentar la carne solo una vez para evitar la proliferación de bacterias.
Para prolongar la duración de los recalentados hasta Año Nuevo, se sugiere congelar las proteínas después de la cena del 24 de diciembre y mantenerlas así hasta su consumo, sin descongelarlas y volver a refrigerarlas. Es esencial refrigerar los alimentos inmediatamente después de la cena para evitar la descomposición acelerada.
Se aconseja usar recipientes sellados para cada platillo, no combinar dos comidas en el mismo recipiente y limpiar el refrigerador para evitar olores y contaminación. Si se busca conservar la comida por más tiempo, se puede congelar directamente en recipientes sellados y retirar del congelador solo antes de su consumo, con un límite de una semana.