Sergio “Checo” Pérez brilló en el Gran Premio de Arabia Saudita tras arrancar desde la tercera posición, superando una penalización y realizando tres adelantamientos en su camino hacia el segundo lugar, manteniendo así su posición como sublíder en el campeonato mundial de pilotos.
El tapatío comenzó de manera prometedora, realizando una excelente salida que le permitió emparejarse con el coche de Charles Leclerc para disputar la segunda posición. Después de una batalla que duró hasta la vuelta 4, Pérez logró adelantarlo de manera inteligente en la primera curva, asegurando así la segunda posición.
La carrera experimentó un cambio significativo luego de un choque protagonizado por Lance Stroll (Aston Martin), lo que provocó la entrada del coche de seguridad. En este escenario, casi todos los pilotos, incluido Pérez, aprovecharon para ingresar a boxes. El mexicano optó por montar neumáticos duros y regresó a la pista en cuarta posición, luchando para alcanzar el podio tan pronto como finalizó el periodo de coche de seguridad.
Tras varios intentos y una estrategia calculada, el piloto de Red Bull logró utilizar el DRS para adelantar a Lewis Hamilton al inicio de la vuelta 13, colocándose en tercer lugar. Repitió esta maniobra contra Lando Norris en la vuelta 18, asegurando así el segundo lugar de manera cómoda.
Sin embargo, la carrera tomó un giro inesperado cuando se anunció oficialmente una penalización de 5 segundos para Pérez, como consecuencia de una “liberación insegura” en boxes, casi provocando una colisión con Fernando Alonso. Esta penalización obligó al mexicano a aumentar su ventaja para asegurar su posición final.
El ganador absoluto de este Gran Premio fue Max Verstappen de Red Bull Racing, seguido por su compañero de equipo, Sergio Pérez, quien pudo absorber la penalización sin problemas. En el tercer puesto del podio se ubicó Charles Leclerc de Ferrari.
Así concluyó el Gran Premio de Arabia Saudita con un resultado satisfactorio para el piloto mexicano, quien sumó su segundo podio de la temporada en igual número de carreras, contribuyendo al dominio de Red Bull Racing en el campeonato mundial de pilotos.