Monserrat Hernández/Grupo Marmor
La Semana Santa en México es una de las celebraciones religiosas más conocidas; además México es reconocido como uno de los países con mayor presencia de catolicismo en el mundo.
Gracias a la diversidad étnica y cultural del país, existen tradiciones muy curiosas y únicas durante la Semana Santa, por lo que aquí te compartimos cuatro de las más impresionantes:
• Procesiones en Taxco, Guerrero:
El pueblo mágico de Taxco es sede de diversas procesiones que dotan el lugar de un ambiente místico. Existen varias cofradías que aparecen casi con aspecto fantasmagórico, con largas túnicas y capuchas, todos en completo anonimato. Para algunos, dan miedo, pero para otros es un acto de completa devoción.
• Danza de los Judas en Pajacuarán, Michoacán:
Al noroeste de Michoacán, en Pajacuarán, los habitantes de este pueblo salen a las calles a bailar, al ritmo de la banda de viento, ataviados con elegantes y elaborados trajes de terciopelo bordados con motivos florales, huaraches, máscaras con cuernos escondidos por un bonete papal -sombrero eclesiástico- y un ‘chirrión’ o látigo que hacen sonar.
• Pesca de la Sardina Ciega en Tapijulapa, Tabasco:
La pesca de la sardina ciega consiste en, primero, acudir a misa a la Iglesia de Santiago Apóstol, para posteriormente danzar por las calles de Tapijulapa hasta llegar al Parque Villa Luz, lugar donde los indígenas de la etnia zoque recogen ‘barbasco’, un tubérculo que combinado con agua sulfurosa y cal es usado para adormecer a los peces y así facilitar su captura.
• Comonorirawachi en Chihuahua:
El Tewerichic es la celebración de Semana Santa que se vive en la comunidad rarámuri en el estado de Chihuahua. La fiesta consta de la representación de una lucha entre los aliados de Dios (soldados) y los guerreros del Diablo (fariseos o chabochis) mientras los danzantes tarahumaras bailan. Al final, el bien logra imponerse y se festeja el triunfo con más baile, comida y bebidas ancestrales.
Es de señalar que todas las tradiciones que te mencionamos también pueden ir acompañadas de misas, cantos, ofrendas, así como del ayuno y abstinencia cuaresmal.