Las altas temperaturas que actualmente afectan a México están generando preocupaciones renovadas sobre la estabilidad del sistema eléctrico nacional, especialmente en zonas industriales como Monterrey, que se perfilan como las más vulnerables a sufrir apagones.
A pesar de contar con una potencia en generación de energía solar en su región, Monterrey enfrenta un riesgo significativo debido a las olas de calor. Óscar Ocampo, especialista en energía del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), señala que, aunque la cercanía de Monterrey a Reynosa, una zona con fuerte generación eólica, podría ofrecer una solución parcial, el verdadero problema radica en la falta de inversión en la capacidad de transmisión eléctrica.
Expertos de la empresa Enlight proponen la implementación de microrredes como solución estratégica para las zonas afectadas por apagones. Sin embargo, para Ocampo, esta solución es secundaria y no aborda el problema de fondo: la necesidad de aumentar la capacidad de transmisión eléctrica en México.
El tamaño del desafío requiere una colaboración estrecha entre la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el gobierno y el sector privado en el próximo sexenio. Según Ocampo, para resolver los problemas del sistema de transmisión eléctrica, se necesitaría cuadruplicar los niveles actuales de inversión.
Evitar apagones es crucial para atraer inversiones extranjeras, especialmente en un contexto donde empresas globales como Amazon y Microsoft están estableciendo presencia en México. La implementación de microrredes podría beneficiar tanto a las industrias como al sistema eléctrico en general, pero el desafío fundamental sigue siendo la infraestructura de transmisión eléctrica insuficiente en el país.