En un instante, la vida de la madre de Ángel dio un vuelco drástico cuando, al intentar cruzar el bullicioso bulevar Adolfo López Mateos en León, Guanajuato, su hijo se soltó de su mano y fue embestido por un camión del transporte público.
El conductor detuvo bruscamente el vehículo y descendió para evaluar la situación, mientras testigos del accidente llamaban rápidamente a los paramédicos y a la policía.
Aunque la situación parecía desesperada, el niño de 5 años, después del impacto, quedó tendido en el suelo con solo lesiones leves, lo que llevó a los paramédicos a considerar el traslado para su atención médica.
En minutos, llegaron más agentes de seguridad que se movilizaron rápidamente para evitar mayores congestiones en el tráfico, dado que la zona es una de las más transitadas de la ciudad.
La madre del pequeño Ángel explicó que su hijo se soltó repentinamente y corrió hacia la avenida, lo que hizo inevitable el choque con el camión, aunque afortunadamente este no circulaba a gran velocidad.
Poco después, los paramédicos y los agentes de seguridad se retiraron, dejando la situación bajo control y permitiendo que el tráfico volviera a la normalidad.
