Monserrat Hernández/Grupo Marmor
Por decreto de la UNESCO, cada 23 de abril se celebra el Día Mundial del Libro, fecha que tiene el objetivo de fomentar la lectura, además de reconocer la importancia de uno de los principales instrumentos inventados en la humanidad para la trascendencia de los conocimientos.
Su origen se remonta al 15 de noviembre del año 1995, como una manera de rendir homenaje a grandes escritores universales como Miguel de Cervantes, Garcilaso de la Vega, Williams Shakespeare, Vladimir Nabkov, Josep Pla, Manuel Mejías Vallejo, entre otros.
Años más tarde, la UNESCO promovió otra iniciativa relacionada con el mundo de las letras: el nombramiento anual de una ciudad como Capital Mundial del Libro. La primera ciudad elegida, en 2001, fue Madrid; en 2024, la seleccionada ha sido Estrasburgo, en Francia.
Importante destacar que los libros representan herramientas para la apertura hacia nuevos conocimientos y valiosos recursos que ayudan en el desarrollo de la creatividad y de las capacidades cognitivas e imaginativas de los niños, jóvenes y adultos.
Hasta ahora, el libro más importante de toda la humanidad es la Biblia. Traducido a 438 lenguas e impreso al menos unas 6 mil millones de veces. Este manuscrito habla del origen de la humanidad y toda su creación, así como todas las enseñanzas del cristianismo a través del evangelio.
Apuntar, que, a pesar de que esta es una conmemoración a nivel mundial, en el caso de México se tiene un día dedicado a esta celebración, se trata del Día Nacional del Libro, efeméride que cada año se celebra el 12 de noviembre, en honor a la poeta, Sor Juana Inés de la cruz.
