Dos enfermeras fueron detenidas tras sedar a recién nacidos en un hospital de Rosario, Argentina. La maniobra, realizada para que los bebés no interrumpieran su turno nocturno, fue descubierta luego de denuncias realizadas dos años atrás.
Las enfermeras Analía Bouhier y Yanina Bessolo enfrentan cargos por abandono de persona y ejercicio ilegal de la medicina. Durante la primera audiencia del caso, se dictó prisión preventiva para ambas por 60 días.
Las denuncias surgieron en el departamento de Neonatología del Sanatorio de Niños de Rosario. Según la fiscalía, las mujeres suministraban benzodiacepinas a los bebés sin indicación médica, con el fin de sedarlos y poder ver televisión o dormir.
El escándalo ha generado gran consternación en la comunidad. A pesar de la experiencia de las enfermeras, una de ellas con 30 años de servicio en el hospital, se reveló un abuso flagrante de su posición y responsabilidad.
La fiscalía ha documentado al menos tres casos de bebés sedados. Las acciones de las enfermeras no solo representan un grave riesgo para la salud de los recién nacidos, sino que también despiertan indignación por la violación de la confianza en el personal médico.
