Activistas de Just Stop Oil, Jennifer Kowalski y Cole Macdonald, irrumpieron en la pista privada del aeropuerto de Stansted en Essex, Inglaterra, y rociaron un par de jets privados con pintura naranja.
Este hecho ocurrió el pasado jueves a las 5:00 a.m., después de cortar la valla del aeródromo con una sierra circular.
Esto se volvió polémica ya que se creía que el jet pertenecía a la cantante Taylor Swift, lo cuál no se ha confirmado hasta el momento.
Los ambientalistas usaron extintores llenos de pintura naranja, los activistas lograron pintar dos de los jets estacionados en la pista.
Además el grupo de activistas advirtió sobre futuras manifestaciones en “áreas clave para la economía de los combustibles fósiles” durante el verano, ante ello, los ambientalistas se tomaron fotos junto con los aviones dañados.
La policía de Essex rápidamente arrestó a Kowalski y Macdonald bajo los cargos de daños criminales e interferencia con la operación de infraestructura nacional. Un portavoz del aeropuerto de Stansted aseguró que las operaciones de vuelo no fueron interrumpidas y que todo seguía funcionando con normalidad.