Michelle Rivas / Grupo Marmor
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, viajó a Kiev para tener una reunión con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. El tema principal del encuentro fue la oportunidad de edificar la paz entre Rusia y Ucrania, en la que propuso un “alto al fuego” con el objetivo de poner fin a la guerra.
“Mi primer viaje me ha llevado aquí porque la cuestión de la paz es importante no sólo para Ucrania, sino para toda Europa. Esta guerra que se está sufriendo está afectando profundamente a la seguridad europea”, declaró Orbán en la rueda de prensa.
Ante estas declaraciones muchos ucranianos creen que un “alto al fuego” consolidaría la fuerza de Rusia en el territorio controlado por el ejército ruso, también afirmaron que en caso de haber negociaciones preferirían la posición de fuerza y no a la defensiva.
Por otro lado, Zelenski hizo una publicación en X, en la que agradeció la participación y apoyo de Hungría, así como el gran progreso que han hecho entre ambas naciones.
“Discutimos el camino hacia una paz justa, duradera y equitativa. Agradecí al primer ministro la participación de Hungría en la Cumbre de la Paz y su apoyo al comunicado final. He compartido con los socios nuestros logros entre las cumbres, mientras preparamos la segunda Cumbre de la Paz. Hemos hecho grandes progresos, y habrá más por venir. Invité a Hungría y al Primer Ministro Orbán a sumarse a estos esfuerzos. También tenemos resultados bilaterales positivos. En general, vemos que ahora las relaciones entre Ucrania y Hungría son completamente distintas: más concretas y transparentes, y reflejan intereses mutuos. Hemos acordado diversos detalles económicos y políticos, de los que se ocuparán nuestros equipos. Es importante que plasmemos nuestras relaciones y logros en un nuevo acuerdo que defina las relaciones de buena vecindad entre Ucrania y Hungría”.