Fer Coronel/Grupo Marmor
Morelia, Michoacán; 04 de julio del 2024.- Tadeo de 11 años tuvo la oportunidad de observar y vivir cómo es la rutina de un soldado desde que se despierta en el cuartel, hace su cama, desayuna y comienza con sus actividades, con el motivo de despertarle el interés además de cumplirle el deseo de ser soldado por un día.
El Capitán Primero de Infantería, Abraham Alarcón Miranda, comenta en entrevista que la actividad de “Soldado Honorario” la realizan cada mes conforme a su programa de actividades de acercamiento cívico, lo que hacen es recibir a infancias con alguna enfermedad que les impida pertenecer a las fuerzas armadas para motivarlos a seguir superándose.
Comparte el Capitán Alarcón que esta dinámica lo alienta a seguir trabajando en pro de la sociedad mexicana, al igual que espera en un futuro se pueda abrir un departamento de inteligencia para que personas como Tadeo puedan trabajar en el ejército, ya que a él le gustaría estudiar robótica cuando sea grande.
Entre sollozos Tadeo recibió su reconocimiento, se unió al cuerpo militar y conoció las diferentes funciones que realizan, mientras se divertía con los soldados y los amigos que trajo consigo, su madre la Sra. María Concepción nos aclara que él sufre de Atrofia Espinal Muscular con Escoliosis Avanzada por lo que no puede caminar y se tiene que mover en silla de ruedas, que es complicado ofrecerle una buena calidad de vida ya que ella es viuda con dos hijos y trabaja, pero que siempre tienen la mente positiva y le ha enseñado a Tadeo que a pesar de su imposibilidad para caminar aún puede realizar sus actividades como cualquier otra persona.