Mafer Arévalo/ Grupo Marmor
Este jueves llegó el tan esperado y feriado 4 de julio para la población estadounidense que resalta su lado patriótico inundando sus calles, vistiendo sus colores y reuniéndose con la familia para celebrar los valores que le han dado libertad y forma a la nación de la que no temen sentirse orgullosos de hacerse llamar “Potencia mundial”.
Dentro del festejo no todos han sido invitados, ya que dentro de su población una minoría de 69 millones de habitantes con un 59% con procedencia mexicana se encuentra en un festejo si no es por costumbre, por gusto o aún está buscando su sentido de pertenencia. La potencia no recibe al migrante trabajador con los brazos abiertos y los valores que se celebran este 4 de julio llegan a crear una confusión de pertenencia en el migrante latino que reside allá.
Y la pertenencia no directa se da en esta clase de festejos en los que se usa la frase no eres de aquí y nada de aquí te pertenece, claro que esta que los migrantes que residen allá representan un 18% de la fuerza laboral, pero con los trabajos más duros y si no ocurre así los empleos son inestables.
Informes para el “Avance del Trabajador Latinoamericano” reveló que un 17 % vive debajo de la línea de pobreza, y el 19.2% tiene salarios inestables y no furtivos.
Las situaciones se encuentran muy a la disyuntiva, ya que inmigrantes latinoamericanos viven con la cara de la moneda que solo pueden ver, para otros la situación “supuestamente” no ha tomado mal camino muy convenientemente siendo tomados estos testimonios por documentales o entrevistas para “Telemundo” por ser un ejemplo.
Sin embargo, en las encuestas y estudios está comprobado que miles de latinoamericanos viven trabajando a marchas forzadas, pagando impuestos federales sin tener acceso a seguro médico, además de vivir con el desgaste mental del “No es mi lugar y estoy haciendo mal”.
Así es como la potencia mundial celebra su querido 4 dejulio,o en donde no hay distinción de razas… ¿Será más que un día de celebración?
