Grecia ha anunciado que el incendio en las afueras de Atenas está bajo control.

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Redacción / Grupo Marmor

Los bomberos griegos han logrado controlar el gran incendio que, desde el pasado domingo, devastó aproximadamente 10.000 hectáreas en las afueras de Atenas, en la región de Ática. Este ha sido el peor incendio forestal del año hasta el momento, que durante casi tres días se extendió rápidamente debido a los fuertes vientos, alcanzando áreas urbanas cercanas a la capital.

La situación ha mejorado significativamente y los residentes de Atenas han comenzado a regresar a sus hogares para evaluar los daños y recuperar lo que queda entre los escombros carbonizados. Lamentablemente, el incendio ha causado la muerte de al menos una persona y ha dañado decenas de viviendas y negocios, aunque aún no se han obtenido cifras exactas sobre el alcance total de estos daños.

En la actualidad, la zona continúa en alerta para sofocar los pequeños focos de incendio que aún podrían estar activos. Los bomberos siguen patrullando la región para asegurar que las brasas, en un suelo aún humeante, no vuelvan a prenderse.

Una primera evaluación presentada durante una reunión ministerial del conservador Kyriakos Mitsotakis indica que menos del 10% de las hectáreas quemadas correspondían a zonas forestales. Además, se estima que cerca de un centenar de edificios resultaron dañados. Las autoridades están investigando las causas del siniestro y están considerando la posibilidad de que el incendio se haya originado por la rotura de un cable de alimentación eléctrica en un poste, según informa el diario Kathimerini.

Se espera que en los próximos días se obtenga más información sobre las causas del incendio y la magnitud total de los daños. Mientras tanto, las autoridades continúan trabajando en la evaluación y recuperación de las áreas afectadas.