El Gobierno de España ha anunciado que no enviará una delegación oficial a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como presidenta de México. La decisión ha causado sorpresa en el ámbito diplomático, ya que históricamente España ha mantenido una relación estrecha con México y ha participado en ceremonias de este tipo.
Aunque no se han dado detalles específicos sobre las razones de esta ausencia, algunos analistas sugieren que podría estar relacionada con desacuerdos políticos recientes entre ambos países. La noticia llega en un momento delicado para las relaciones bilaterales, que se han visto tensadas por diferencias en temas como política migratoria y acuerdos económicos.
Por su parte, el Gobierno de México no ha emitido aún una respuesta oficial a la decisión española. Se espera que en los próximos días se realicen declaraciones que clarifiquen el impacto de esta situación en las relaciones entre ambas naciones.
