El verde se expande en la Antártida: un síntoma del cambio climático

Banner

REDACCIÓN | GRUPO MARMOR

Un estudio reciente revela que las zonas verdes de la Antártida están expandiéndose a un ritmo acelerado, un fenómeno que alerta sobre los efectos del calentamiento global en uno de los lugares más extremos de la Tierra. Aunque la vegetación solo cubre el 0.12% del continente helado, datos satelitales muestran que entre 2016 y 2021 su crecimiento se ha incrementado un 30%, en comparación con registros desde 1986.

Investigadores de las universidades británicas de Exeter y Hertfordshire, junto con el British Antarctic Survey (BAS), han monitoreado la vegetación en la península antártica, al sur del continente, donde el color verde está ganando terreno sobre el blanco hielo, algo inusual en un lugar caracterizado por sus bajas temperaturas y largos periodos de oscuridad invernal.

El estudio resalta cómo este crecimiento acelerado de vegetación es un síntoma evidente del calentamiento global. Aunque algunos expertos han argumentado que el hielo marino antártico ha aumentado en las últimas décadas, los investigadores señalan que la pérdida de hielo en ambos polos ha crecido drásticamente, afectando especialmente a la capa de hielo de la Antártida occidental.

Bartlett, uno de los autores del estudio, destacó la complejidad del cambio climático, que puede producir efectos inesperados y, a veces, contradictorios. Sin embargo, afirma que no queda duda de que los cambios en el medio ambiente antártico tienen un origen antropogénico, es decir, provocado por la actividad humana.

La expansión de las zonas verdes en la Antártida no solo es una señal del calentamiento, sino también un recordatorio de los cambios drásticos que el cambio climático está provocando en regiones que, hasta hace poco, se consideraban inmunes.