Redacción / Grupo Marmor
La guardia presidencial y efectivos militares de Corea del Sur impidieron que este viernes las autoridades detuvieran al presidente destituido Yoon- Suk-yeol, esto se vio en un tenso enfrentamiento de seis horas en el interior del complejo residencial de Yoon, en pleno centro de Seúl.
Yoon es investigado insurrección a raíz de su intento de imponer la ley marcial el 3 de diciembre, que conmocionó a Corea del Sur y dio lugar a la primera orden de detención contra un presidente en el cargo.
La Oficina de Investigación de la Corrupción de Altos Cargos señaló en un comunicado que “se consideró prácticamente imposible ejecutar la orden de detención debido al enfrentamiento en curso”.
Los responsables de la oficina anticorrupción, que son liderados por un conjunto de investigadores, llegaron a las puertas del complejo presidencial poco después de las 7:00 hora local y entraron a pie.
Ya que se encontraron dentro del complejo, rápidamente las fuerzas anticorrupción y la policía se vieron superadas en número por los cordones de personal del Servicio de Seguridad Presidencial, así como los soldados adscritos a la seguridad presidencial.
Fueron más de 200 agentes y soldados de la guardia presidencial los que bloquearon a los agentes anticorrupción y a la policía, Aunque se produjeron altercados y los agentes presidenciales parecían llevar armas de fuego, ninguna arma fue desfundada.
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Aparte de la investigación penal, el caso de destitución de Yoon está en manos del Tribunal Constitucional, que debe decidir si lo restituye definitivamente.
El viernes se celebró una segunda vista y el tribunal fijó los primeros alegatos orales para el 14 de enero.
El equipo que defiende a Yoon, al argumentar que no había motivos para destituirlo, citó en su documento registrado ante el tribunal, una sentencia de la Corte Suprema de Estados Unidos de julio del 2024, que afirmaba que Donald Trump tenías inmunidad por las acciones tomadas como presidente.