Christopher, un niño de dos años, murió tras ser atropellado junto con su madre, Emily, en la Central de Abastos de Puebla. El conductor responsable huyó de la escena, dejando a la familia destrozada y exigiendo justicia.

El trágico accidente ocurrió el 11 de marzo. Una camioneta Voyager color arena arrolló a Emily y Christopher, retrocediendo para pasarles por encima nuevamente antes de escapar. Christopher falleció, mientras que Emily permanece hospitalizada en estado grave, aún sin saber la muerte de su hijo. Se espera que requiera dos cirugías más.
El 17 de marzo, familiares y amigos se reunieron para el funeral de Christopher en la colonia Revolución Mexicana. El padre del niño, Fernando, encabezó el servicio fúnebre, exigiendo justicia por la muerte de su hijo y la grave condición de su esposa. Fernando ha decidido esperar a que Emily se recupere antes de darle la devastadora noticia.
Hasta el momento, las autoridades no han proporcionado información sobre el paradero del vehículo o la identidad del conductor, dejando el caso impune. La familia continúa su búsqueda de justicia.