“Estamos volviendo a los tiempos del 68 en donde todo es opresión”: Alfonso Martínez sobre reforma de telecomunicaciones

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Javier Velázquez/Grupo Marmor

Luego de que este próximo lunes 28 de abril tentativamente los diputados federales estarían votando la reforma a la ley de telecomunicaciones en México, el presidente municipal de Morelia, Alfonso Martínez Alcázar señaló que “estamos volviendo a los tiempos del 68 en donde todo es opresión”.

El edil moreliano determinó que Morena se encuentra construyendo un país en donde la democracia se está volviendo inexistente determinando que hasta que de nueva cuenta se derrame sangre de vidas humanas como en el año mencionado, se estará despertando la lucha de los derechos de todos los mexicanos.

Además destacó que uno de los principales rubros que se verán afectados son los medios de comunicación, ya que resaltó que ahora, podrán ser censurados y directamente “bajados” en caso de que el gobierno federal lo determine, por lo que hizo un llamado a la ciudadanía en general y a los medios, para que levanten la voz y frenar dicha reforma antes del lunes.

También destacó que las personas estarán sujetas a una determinación puntual de las autoridades, quienes podrán bajar los perfiles o en determinado caso, impedir que las redes sociales se puedan reproducir en México, en caso de que no sea conveniente para ellos.

El dictamen para expedir una nueva Ley en Materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión fue aprobado este jueves por las Comisiones Unidas de Radio, Televisión y Cinematografía; de Comunicaciones y Transportes; y de Estudios Legislativos en una sesión presidida por los senadores José Antonio Cruz Álvarez Lima, Alejandro Esquer Verdugo y Enrique Inzunza Cázarez.

El dictamen de 226 páginas y 283 artículos se presentó en la noche del miércoles 23 de abril, horas antes de que las Comisiones se reunieran a discutir la propuesta de reforma. Durante el debate la oposición acusó que la propuesta permitirá la censura estatal, mientras que el oficialismo la defendió bajo el argumento de la soberanía comunicativa del Estado.