Ulises Diaz || Grupo Marmor
La capital venezolana fue testigo de un suceso digno de una escena eliminada de Stranger Things o el tráiler de una película de ciencia ficción de bajo presupuesto, pero con efectos visuales de alto impacto. El pasado fin de semana, varios ciudadanos reportaron la aparición de extraños anillos de humo flotando en el cielo caraqueño, desatando un torbellino de teorías que van desde experimentos secretos hasta rituales sobrenaturales no autorizados.
Los anillos, perfectamente circulares y con un movimiento hipnótico, fueron captados por decenas de testigos en diferentes zonas de la ciudad. Algunos afirmaron que parecían “salidos de una serie de terror adolescente”, mientras otros, más pragmáticos, sugieren que podrían ser el resultado de explosiones controladas, fuegos artificiales industriales o simples efectos pirotécnicos mal dirigidos.
Aunque hasta el momento no hay una explicación oficial, las redes sociales no tardaron en bautizar el fenómeno como El Portal de Sabana Grande, entre memes, especulaciones esotéricas y teorías conspirativas que involucran ovnis, realidades paralelas y, cómo no, el regreso de los dragones.
Por ahora, los anillos se han desvanecido como llegaron: sin previo aviso, dejando tras de sí una estela de misterio y una Caracas un poco más atenta al cielo… y quizás un poco más paranoica también.