Redacción / Grupo Marmor
Diez mil almas corearon himnos generacionales en una noche electrizante donde la música se fusionó con la protesta. Desde temprano, el Auditorio vibró con la energía de fans de todas las edades, anticipando el show. Al apagarse las luces, la banda irrumpió con “Hasta morir” y “La célula que explota”, desatando una euforia colectiva.
Saúl Hernández, con su carisma inigualable, conectó con el público, dedicando “Ayer me dijo un ave” a la unidad y la importancia de mantenerse unidos ante la adversidad. El concierto fue un viaje a través de la discografía de la banda, con momentos inolvidables como el solo de saxofón de Diego Herrera en “Sombras en tiempos perdidos” y la emotiva interpretación de “Afuera” junto a un pequeño fan. Pero la noche no se limitó a la música.
Saúl aprovechó la ocasión para expresar su apoyo incondicional al Foro Alicia, criticando duramente el cierre del recinto por parte del Ejército y la Guardia Nacional, y dedicando “Antes de que nos olviden” a la lucha por la libertad de expresión. Un concierto que trascendió la música, convirtiéndose en un poderoso mensaje de unidad y resistencia.