Ulises Diaz || Grupo Marmor
El pasado sábado 7 de junio, dos personas fueron atacadas por un par de perros mientras cruzaban un puente peatonal ubicado en la autopista México-Querétaro, a la altura del municipio de Coyotepec, Estado de México. Las víctimas sufrieron heridas de gravedad y fueron trasladadas a un hospital para recibir atención médica.
Si bien aún se desconoce si los perros reaccionaron de manera instintiva por sentirse amenazados o si fueron agresivos desde un inicio, el incidente ha encendido nuevamente las alertas sobre el creciente problema de animales en situación de calle en el país.
Según datos recientes, en México más del 70% de los animales de compañía viven en abandono. Se estima que existen alrededor de 18 millones de perros y gatos callejeros. Las principales causas de este fenómeno incluyen la falta de educación sobre la tenencia responsable, mudanzas, problemas económicos, y el hecho de que muchas mascotas son regaladas de forma impulsiva en fechas especiales, para luego ser abandonadas.
Este tipo de abandono puede llevar a que los animales desarrollen comportamientos agresivos, motivados por el hambre, la falta de cuidados veterinarios y el entorno hostil. Al sentirse acorralados o amenazados, actúan en defensa propia, guiados por sus instintos naturales.
🐾 Llamado a la conciencia
Es importante recordar que los perros no tienen la culpa de haber sido abandonados o de haber nacido en la calle. Son seres vivos con necesidades físicas y emocionales, y su comportamiento muchas veces es el resultado del trato que han recibido por parte del ser humano.
Por ello, se hace un llamado urgente a la ciudadanía y a las autoridades para:
- Fomentar la tenencia responsable de mascotas, que incluye su esterilización, vacunación, alimentación adecuada y un entorno seguro.
- Promover campañas de concientización y adopción, en lugar de la compra de animales.
- Evitar el maltrato animal, ya que muchos perros callejeros solo están sobreviviendo y responden con agresividad al miedo o al dolor.
El respeto por la vida animal es también una forma de proteger nuestra propia comunidad. Cuidarlos, educarnos y actuar con responsabilidad es tarea de todos.