Un video viral muestra a agentes encubiertos de ICE, vestidos de civil, arrestando a un ciudadano chino en una calle de Los Ángeles, lo que ha desatado una ola de indignación en redes sociales y cuestionamientos sobre la legalidad del procedimiento. Aunque la agencia tiene autoridad para realizar detenciones en espacios públicos sin orden judicial, debe respetar los derechos constitucionales de todas las personas, independientemente de su estatus migratorio.
La ley permite que estos arrestos se lleven a cabo con base en causa probable, incluso por parte de agentes sin uniforme, pero no autoriza prácticas discriminatorias ni el uso de tácticas engañosas. La persona detenida conserva el derecho a guardar silencio, a no presentar documentos si no hay orden judicial, y a grabar el encuentro si no interfiere.
Organizaciones de derechos civiles advierten que este tipo de operativos encubiertos pueden vulnerar libertades fundamentales y generar temor en las comunidades migrantes. El video ha reavivado el debate sobre el alcance de las facultades de ICE y la necesidad de mayor transparencia y control en sus procedimientos.
