En Naucalpan, Estado de México, no están celebrando una fiesta de espuma. Lo que parece una nube blanca y divertida es, en realidad, una mezcla peligrosa de residuos químicos, detergentes industriales y aguas negras que se levantó durante la reciente inundación.
Vecinos que tuvieron contacto con esta espuma ya reportaron ronchas, irritaciones y urticaria. ¿La causa? No es magia, es química. Cuando lavas tu ropa, el jabón genera espuma para “sacar la mugre”. Bueno, esto es igual… pero a escala tóxica y sin suavizante.
La espuma que flota por las calles no es inofensiva ni estética. Es literalmente la suciedad de desechos urbanos disueltos: residuos industriales, aguas residuales y contaminantes urbanos que se revolvieron con el agua de la inundación y ahora flotan como si fueran parte de un carnaval mal planeado.
Así que, si ves burbujas en la calle, no te emociones: no es una fiesta, es una alerta sanitaria.