La noche y madrugada de este lunes dejaron algo más que cielo nublado: intensas lluvias provocaron severas inundaciones en los alrededores del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), complicando la circulación vehicular y el acceso a la terminal aérea.
Imágenes compartidas en redes sociales muestran automóviles avanzando lentamente entre encharcamientos que bien podrían confundirse con canales. El escenario, más propio de un paseo en lancha que de una avenida capitalina, vuelve a poner en evidencia la vulnerabilidad de la infraestructura ante fenómenos meteorológicos comunes en temporada de lluvias.
Mientras tanto, usuarios y conductores enfrentan la situación con resignación (y algo de humor), sorteando las “olas” con más paciencia que prisa. Como cada año, la Ciudad de México nos recuerda que, con suficiente lluvia, cualquier vía puede convertirse en vía… acuática.