Usuarios del transporte público denuncian que el conductor de la unidad 222 de la Ruta Roja 3B fue visto hablando por teléfono mientras manejaba, poniendo en riesgo la seguridad de los pasajeros. La situación resulta especialmente preocupante, ya que en el interior del vehículo está visible un reglamento que prohíbe expresamente este tipo de conducta. Este tipo de irresponsabilidad evidencia la falta de supervisión y la urgente necesidad de hacer cumplir las normativas para garantizar la seguridad vial.