Javier Velázquez/Grupo Marmor
La muerte de Silverio Villegas, un migrante michoacano asesinado por agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en Chicago, ha generado indignación y demandas de justicia en México, por lo que el cuerpo de Villegas fue repatriado a Michoacán después de un proceso que generó sospechas debido a su rapidez.
El secretario de Migración en Michoacán, Antonio Soto Sánchez, expresó su preocupación por la celeridad con la que se llevó a cabo la repatriación, ya que normalmente los procesos de repatriación de cuerpos tardan entre uno y dos meses.
La muerte de Silverio Villegas ocurrió el 12 de septiembre en Franklin Park, Illinois, durante una redada del ICE. Según informes, Villegas se resistió a la detención y recibió un disparo que le ocasionó la muerte.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) ha dado seguimiento al caso y ha solicitado una investigación exhaustiva para esclarecer las circunstancias de la muerte de Silverio Villegas.
El cuerpo de Silverio Villegas llegó al aeropuerto nacional de Guadalajara a las 5:10 de la mañana y fue trasladado a Irimbo, Michoacán, donde será sepultado.
La comunidad michoacana se encuentra de luto y exige justicia para Silverio Villegas y su familia. La rápida repatriación del cuerpo ha generado dudas y preocupaciones sobre la transparencia del proceso.
La familia de Silverio Villegas y las organizaciones de derechos humanos exigen una investigación exhaustiva y transparente sobre la muerte de Silverio Villegas. El gobierno mexicano ha reiterado su compromiso con la protección de los derechos humanos de los migrantes y ha solicitado a las autoridades estadounidenses que tomen medidas para prevenir incidentes similares en el futuro.