Javier Velázquez/Grupo Marmor
Familiaries y amigos le dieron el último adiós a Bernardo Bravo Manríquez, presidente de la Asociación de Citricultores de Apatzingán, asesinado el lunes pasado.
La ceremonia luctuosa estuvo marcada por la tristeza y la indignación ante el crimen; Bravo Manríquez era reconocido por su labor en defensa de los productores de limón en la región.
Fue en las instalaciones de la capilla que se encuentran dentro del panteón Jardines del Tiempo o mejor conocido como Gayoso, donde se llevó a cabo la misa de cuerpo presente.
La Fiscalía General del Estado de Michoacán informó que sigue investigando el caso y busca a los responsables, su asesinato ha generado conmoción en la región y ha sido condenado por autoridades gubernamentales.
Bernardo Bravo Manríquez fue un líder destacado en la industria limonera de Michoacán, conocido por denunciar extorsiones y amenazas contra productores de limón en la región. Su muerte ha generado preocupación y solidaridad en el sector agrícola.