El peso mexicano continuó su tendencia negativa y se depreció por cuarta sesión consecutiva, presionado por un fortalecimiento global del dólar y la cautela de los inversionistas ante los débiles datos económicos del tercer trimestre.
La moneda nacional se ubicó en 18.57 pesos por dólar, con una pérdida de 0.27 por ciento frente al cierre previo de LSEG. Con ello, el peso acumuló una caída semanal de 0.7 por ciento y un retroceso total de 1.4 por ciento en octubre, reflejando la incertidumbre en los mercados y la desaceleración económica local.
Analistas señalan que el panorama podría mantenerse volátil en los próximos días, mientras los operadores evalúan las señales de la Reserva Federal de Estados Unidos y el desempeño de la economía mexicana en el cierre del año.