El gobierno federal retomó la creación del nuevo Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (PANAUT), una base de datos que busca vincular cada línea celular con la identidad de su propietario a través de su CURP, con el objetivo de prevenir delitos como extorsión y fraude telefónico.
De acuerdo con un análisis del portal El Economista, el nuevo sistema tendrá un costo estimado de 4,053 millones de pesos (alrededor de 220 millones de dólares), inversión que será absorbida inicialmente por las empresas de telecomunicaciones, pero eventualmente trasladada a los usuarios mediante ajustes en tarifas o servicios.
El registro contemplará la recopilación de información como el nombre completo del titular, su CURP y otros datos de identificación, además de integrar un sistema de validación biométrica para verificar la identidad de los usuarios.
El proyecto incluye rubros como:
- Validaciones biométricas y pruebas de vida: 4,031 millones de pesos.
- Avisos de seguridad y fallas del sistema: alrededor de 515 millones de pesos.
- Plataforma de registro: 22.6 millones de pesos.
En conjunto, los operadores podrían recurrir a incrementar tarifas, reducir la vigencia de paquetes o disminuir beneficios para recuperar la inversión necesaria.
Este nuevo padrón representa el segundo intento por implementar un registro nacional de líneas móviles. El primer PANAUT fue declarado inconstitucional por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en 2022, al considerar que vulneraba el derecho a la privacidad y a la protección de datos personales.
Actualmente, el nuevo PANAUT se encuentra en consulta pública y se espera que su implementación se defina a finales de noviembre de 2025.


















