La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, defendió con firmeza la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en el caso de Ricardo Salinas Pliego, asegurando que no fue una “consigna” política, sino el fruto de un prolongado proceso jurídico. Según indicó, la decisión del tribunal refleja el sistema de justicia funcionando, no una orden partidista.
Sheinbaum recordó que detrás de la resolución de la Corte hay más de 15 años de litigios, con numerosos amparos y recursos legales presentados por el Grupo Salinas contra los créditos fiscales impuestos por el Servicio de Administración Tributaria (SAT). En su opinión, no se trata de una acción arbitraria del Ejecutivo, sino de un proceso legal complejo y legítimo.
Además, la mandataria advirtió que la Corte llegó a “congelar” algunos de estos casos durante años para evitar resolverlos, lo que, según ella, demuestra que no fue una resolución hecha a la ligera. Ahora, con los fallos definitivos, se establecen sentencias firmes que obligan a las empresas de Salinas a responder por sus adeudos.
Por su parte, Sheinbaum señaló que si Grupo Salinas paga, el conflicto podría cerrarse de inmediato, pero si no lo hace, Hacienda iniciará los procedimientos legales que corresponden para exigir el cumplimiento de la ley.