José Antonio Cruz Medina fue designado como nuevo titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Michoacán, convirtiéndose en una de las figuras clave dentro de la estrategia estatal para el fortalecimiento de la seguridad. Su trayectoria y experiencia en corporaciones federales y estatales lo colocan como uno de los perfiles con mayor formación operativa dentro del gabinete de seguridad del estado.
Cruz Medina inició sus labores en Michoacán durante la actual administración del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, cuando asumió el cargo de subsecretario de Investigación Especializada en la SSP. En esa posición que mantuvo hasta el pasado 18 de agosto tuvo a su cargo investigaciones relevantes contra delitos de alto impacto.
Durante su gestión encabezó las indagatorias preliminares que derivaron en la detención de Jesús “N”, alias El Chuy o La Hamburguesa, en el municipio de Zacapu. Sin embargo, el presunto delincuente fue liberado poco después, en medio de una controversia legal por aparentes irregularidades en la integración de la carpeta de investigación por parte de la Fiscalía General de la República (FGR).
El 18 de agosto, Cruz Medina dejó la SSP para incorporarse a la Fiscalía General del Estado (FGE), tras la llegada de Carlos Torres Piña como nuevo fiscal general, luego de la renuncia de Adrián López Solís. Ahí fue nombrado fiscal coordinador del estado.
Con experiencia en la Guardia Nacional (2020-2022), la extinta Policía Federal (2007-2019) y la Guardia Estatal de Baja California, además de entrenamiento con el FBI en México, Cruz Medina es considerado un perfil operativo con vínculos cercanos a estructuras federales de seguridad, incluida la encabezada por Omar García Harfuch.
Su nombramiento como secretario de Seguridad Pública representa un relevo estratégico para reforzar el llamado Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, en coordinación con el Gobierno de México y la estrategia nacional liderada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.