Este 18 de noviembre de 2025, el mercado laboral mexicano experimenta un notable aumento en la oferta de vacantes dentro del sector servicios, lo que refleja una recuperación del empleo formal y plantea importantes implicaciones sociales en un país donde la informalidad sigue siendo alta.
El sector servicios (incluyendo comercio, actividades empresariales, sociales y personales) se posiciona como el motor principal de la creación de empleo en México. Datos recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) muestran que una mayoría significativa de la población ocupada se desempeña en estas actividades, confirmando su peso en la economía nacional.
Por su parte, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reporta uno de los niveles más elevados de afiliación laboral formal en su historia, lo que sugiere una consolidación del empleo más estructurado. Este crecimiento en el empleo formal contribuye a una mayor seguridad social y protección para los trabajadores.
Desde el punto de vista social, el aumento de oportunidades laborales en servicios puede generar beneficios amplios, pues ofrece un canal de ingreso tanto a jóvenes como a personas que tradicionalmente han participado en el mercado informal. Esta dinámica podría favorecer una mejor distribución del ingreso y el acceso a prestaciones laborales.
Sin embargo, persisten retos relevantes. A pesar de la formalización, una parte considerable de la población activa en México aún trabaja en condiciones informales, sin cobertura de seguridad social ni derechos laborales plenos. Esta brecha limita la eficacia del crecimiento en vacantes para alcanzar una mejora real en la calidad de vida de muchos trabajadores.
Expertos en relaciones laborales señalan que la concentración de vacantes en el sector servicios también refleja una estrategia de recuperación económica orientada a actividades de bajo capital fijo, lo que puede favorecer rapidez en la reactivación, pero no necesariamente crear empleos de alta productividad.
Además, algunos empleadores muestran cautela para ampliar sus plantillas. Según analistas económicos, la incertidumbre macroeconómica podría llevar a que un porcentaje importante de empresas limite nuevas contrataciones en los próximos meses, lo cual podría frenar el ritmo de generación de empleo.
Geográficamente, la mayor parte del crecimiento en vacantes se observa en zonas metropolitanas y entidades con alta conectividad, como la Ciudad de México y el Estado de México. En estas regiones, las empresas de servicios sociales, empresariales y personales están generando un volumen significativo de ofertas, lo que puede aumentar las desigualdades laborales entre regiones más industrializadas y otras menos dinámicas.
La alta demanda de vacantes en el sector servicios observable este 18 de noviembre de 2025 evidencia una recuperación laboral con componentes positivos, como la formalización de empleos, pero también con desafíos estructurales, especialmente en materia de informalidad y desigualdad regional. Para que este impulso tenga un impacto social duradero, será clave impulsar políticas públicas que fortalezcan la inclusión laboral, garanticen condiciones dignas de trabajo y distribuyan de manera más equitativa los beneficios del crecimiento.


















