Las autoridades mexicanas han dado a conocer detalles sobre la planificación del asesinato de Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, coordinado por Jorge Armando ‘N’, alias El Licenciado.
Las investigaciones establecen que un grupo criminal operaba mediante una aplicación de mensajería. En ese chat, El Licenciado impartía órdenes precisas para vigilar al alcalde: se solicitó que los implicados se ubicaran en diferentes puntos, monitorearan sus movimientos y compartieran su ruta y horarios.
A las 18:06 horas del día del ataque, Ramiro ‘N’ envió un video al grupo en el que se observaba la jardinera donde más tarde ocurriría el homicidio, e indicó que estaba presente para “ubicar al cliente”, según las autoridades.
Más adelante, a las 19:45, se comunicó por el chat que Manzo ya se encontraba en el evento público y que su presencia se estaba transmitiendo en redes sociales.
A las 20:00, Ramiro reportó que creía que el agresor estaba sometido por autoridades y compartió un video del sitio tras el ataque. Poco después, a las 20:14, ordenó que recogieran a Fernando Josué ‘N’, uno de los colaboradores en la ejecución.
Según el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, El Licenciado no solo daba órdenes, sino que también ejercía control sobre la disciplina interna: Ramiro fungía como instructor de armas para algunos miembros y habría aplicado castigos físicos cuando no se cumplían las instrucciones.
Para evitar su localización, El Licenciado cambió repetidamente sus tarjetas SIM. Sin embargo, gracias al trabajo de inteligencia y análisis de las conversaciones, fue identificado y detenido en Morelia en un operativo conjunto.
La detención se realizó con apoyo de la Fiscalía de Michoacán y la Secretaría de Seguridad estatal, en una acción coordinada interinstitucional.


















