La nueva reina del Miss Universo 2025 ha alzado la voz tras dar a conocer que vive una ola de odio y amenazas de muerte a raíz de su coronación mensajes cargados de agresiones dirigidas a ella y a su familia.
A través de sus historias en redes sociales compartió capturas que evidencian insultos, calumnias, intentos de difamación y hasta solicitudes de violencia contra ella.
En sus publicaciones, Bosch aclaró que su victoria no es un privilegio para ostentar, sino un compromiso con las mujeres que han sido víctimas de violencia: “no voy a pedir permiso para brillar”.
Y ante la ola de críticas, amenazas y comentarios violentos, enfatizó: “ningún ataque hará que me arrodille”, reafirmando su postura firme, su dignidad y su voluntad de utilizar su corona para alzar la voz por quienes sufren violencia.
Si quieres, puedo armarte una crónica extendida sobre esta polémica —introducción, contexto, reacciones públicas y lo que representa esta postura en temas de violencia de género.



























