WhatsApp incorporó una configuración de privacidad que permite limitar quién puede añadir a los usuarios a grupos, función conocida como “modo antispam”. La herramienta busca reducir los riesgos de estafas que suelen comenzar con la inclusión automática en chats grupales desconocidos.
De acuerdo con información difundida por medios especializados en tecnología y actualizaciones del propio servicio, la función “Quién puede añadirme a los grupos” se encuentra disponible en el menú Ajustes → Privacidad → Grupos. Con esta opción, los usuarios pueden elegir si únicamente sus contactos o personas específicas tienen autorización para agregarlos a un grupo.
Expertos en ciberseguridad señalan que este ajuste ayuda a frenar estafas que inician al integrar a la víctima en grupos donde circulan enlaces sospechosos, promociones falsas o mensajes diseñados para obtener datos personales mediante técnicas de phishing.
Además del modo antispam, especialistas recomiendan activar la verificación en dos pasos para reforzar el control de acceso a la cuenta; limitar la visibilidad de datos como foto, estado y última conexión; y desactivar la descarga automática de archivos provenientes de números desconocidos.
Para activar la función, basta con seguir estos pasos:
- Abrir WhatsApp.
- Acceder a Ajustes → Privacidad.
- Entrar en “Grupos”.
- Seleccionar “Mis contactos” o “Mis contactos, excepto…”.
Con esta configuración, solo los contactos autorizados podrán añadir al usuario directamente a un grupo, mientras que cualquier intento externo enviará una invitación que puede aceptarse o ignorarse.
Aunque la herramienta no elimina por completo los riesgos, constituye una capa adicional de seguridad que ayuda a prevenir ingresos no solicitados y a mantener mayor control sobre la actividad dentro de la plataforma.