Una aguda escasez mundial de chips de memoria desde DRAM hasta las memorias de alto rendimiento (HBM) usadas en inteligencia artificial, está desatando una crisis de suministro que ya pone en jaque a la industria tecnológica.
Reuters
Empresas dedicadas a IA y electrónica de consumo luchan por asegurar componentes esenciales: gigantes como Microsoft, Google y ByteDance están compitiendo con fabricantes de smartphones y computadoras por una oferta cada vez más limitada.
El impacto ya se siente: los precios de chips como DRAM y HBM se han más que duplicado en algunos segmentos desde febrero, y los inventarios han caído dramáticamente.
Esto ha encarecido productos tecnológicos como teléfonos, PCs o servidores y ha generado demoras en lanzamientos y producción.
Bloomberg Línea Brasil
Analistas advierten que la crisis podría persistir hasta 2027 o más, especialmente mientras la demanda de IA siga creciendo —lo que obligará a la industria a adaptarse con producción más selectiva, priorización de proyectos de alto valor o innovación en alternativas de chips.



















